.Carta a los Sobrevivientes. Me encontraba sentada en una cama de una estrecha habitación. Fuera había una turba de muchas personas que tenían deseos de acabar con la vida de mi compañero y la mía. Cerré la puerta y los ladridos de un perro rabioso, se escucharon peligrosamente cerca. La puerta de madera separaba nuestras vidas del frenesí que había al otro lado. Sostuve la puerta y le pedí a mi pareja que me ayudase con la presión que ejercían sobre ella. Eduardo, se había convertido en piedra. Los afilados y largos colmillos del perro se clavaron en la madera, produciéndome daño en la mano. Faltaba poco para que entraran. Decidí abrir la puerta y enfrentarme a mi destino, más al otro lado del umbral, se veían a los individuos que querían hacernos daño, saltando al vacío por la ventana que había al final del pasillo. En un abrir y cerrar de ojos, se quedó totalmente vacío, ya no había peligro. ********* Abrí los ojos y me encontraba en ...